De cuarentenas y autoexigencias…

 

coronavirus vidaexpat psicologa online

Hace rato que este artículo se está escribiendo. No te puedo decir que sea en cada sesión de las últimas semanas pero sí en muchas de ellas. Cada vez que un paciente cuenta lo mal que se siente porque no está siendo “productivo” en esta cuarentena me pregunto cómo llegamos a esto. Estamos en medio de una situación sin precedentes. Estamos viviendo algo inédito y zas!, ya hemos logrado decirnos cómo deberíamos estar haciéndolo.

No me digas que no es impresionante. Porque que tengamos una idea de cómo hay que vivir, estudiar, viajar, expatriarse, etc, etc… bueno, eso lo venimos haciendo hace años. Pero esto es totalmente novedoso y aún así ya lo conquistó el “deber ser”!

Seguro te compartieron ya miles de opciones; si nos descuidamos parece que ya podríamos haber obtenido una maestría en alguna carrera nueva, descubierto miles de hobbies -desde la cocina hasta crear nuestra propia huerta pasando por la confección de nuestra propia ropa- y, por supuesto, a la vez ya deberíamos estar dominando un par de lenguas. Y no, no vale contar las que hablábamos antes de la pandemia.

Según dónde estés viviendo, tu cuarentena será más o menos estricta pero nadie, naaadie escapa a las redes (de hecho así te está llegando este artículo también). Entonces a través de las redes nos vamos encontrando con todo lo que se espera que hagamos en esta cuarentena. Y no es que seamos unos seres tremendamente influenciables sino que, a fuerza de repetición, hasta el más advertido cae.

¿En qué cae, te preguntarás? En esta nueva tendencia, la de la hiper productividad, la de tener que aprovechar cada minuto de la cuarentena, la de sentir que nunca es suficiente. Y por eso se me hizo urgente escribir este artículo. Breve pero concreto, porque me parece que es fundamental que seamos cada vez más los que digamos esto. No pasa nada si no aprovechas este tiempo al máximo. Como tampoco es cierto que tu cuarentena sea peor o mejor, o más fácil o menos complicada que otras.

Hay cuarentenas de todos los colores (solteros en pareja, solteros con amigos, con hijos, sin hijos, solos, etc) y sobre eso espero poder escribir pronto. Cuarentenas con salidas y sin ellas, cuarentenas con trabajo y sin él. Esta pandemia es también una oportunidad para ser un poco más tolerantes… con nosotros mismos!! Si no estamos pudiendo hacer toooodo lo que creímos, si no estamos haciendo todo lo que los demás suponen que deberíamos hacer, eso no nos hace ni mejores ni peores personas.

Somos humanos y estamos haciendo lo que podemos. Nos levantamos y tratamos de ver cómo afrontar el nuevo día, para algunos es más fácil y para otros no tanto. Y no tiene que ver con nuestra calidad humana, esto tiene que ver con muchas más cosas de las que podrías imaginarte porque la cuarentena y el coronavirus hacen tambalear nuestras estanterías, cuestionan nuestros saberes (individuales y colectivos), nuestras certezas, nuestra relación a la incertidumbre, nuestros duelos actuales y pasados (sobre esto también espero poder escribir prontamente) y por esto es que cada uno la está procesando de manera diferente.

En un momento donde muchas de nuestras necesidades básicas están siendo cuestionadas, no aporta nada torturarnos más con el deber ser. Lo único que podríamos generalizar es que cuanto más nos maltratemos por no estar a la altura de lo que se espera de nosotros (sean otros o nuestra propia mirada) peor la vamos a pasar.

Pero si aún así, no estás pudiendo frenar esos pensamientos, lo único que te pido es que este artículo no se convierta en una exigencia más. En todo caso, que su utilidad sea tomar la de nota de que a uno se le está complicando no autoexigirse. Entonces uno tal vez podrá hablarlo con un amigo o familiar o, si el sentimiento aún persiste, considerar la opción de pedir ayuda profesional.

LA VIDA EXPAT
NO SIEMPRE ES FÁCIL...
I agree to have my personal information transfered to MailChimp ( more information )
Por eso escribí este eBook
GRATUITO para ayudarte.
A mí tampoco me gusta el spam.
Tu email no va a ser vendido ni compartido con nadie.